En 1905 se entregaba el cuarto Premio Nobel de la Paz de la historia. La galardonada fue Bertha von Suttner, una mujer entregada en cuerpo y alma a la defensa del pacifismo. Hija de una de las familias austriacas con más tradición militar de Viena, Bertha rompió con aquella existencia, se casó en secreto y vivió penurias económicas.
En París trabajó brevemente para Alfred Nobel con quien estableció una profunda relación de amistad que duraría años. La vida y el ejemplo de Bertha von Suttner, autora de la obra cumbre del pacifismo ¡Abajo a las armas¡, le sirvió como inspiración a Nobel para crear su reputado premio.
El primero de todos, el de la Paz, abrió el camino a una larga tradición de reconocimientos a la labor humana, científica, económica y literaria. Y la primera mujer en iniciar dicha tradición fue Bertha von Suttner.
Bertha Felicitas Sophie nació el 9 de junio de 1843.